Amanece un día más. Otro. Las 9:00 am -¿¡Qué mierda se oye!?- Fin. A las 11:35 de nuevo amanece. Otro día -ojalá-. El sueño ha sido raro, como la mayoría, aunque ya no es, ni recuerdo bien lo que fue. Voy a recordarlo. Imposible. He faltado a clase, si quiero ir a la siguiente tengo que dar un salto -YA-, ducharme en 2 segundos, desayunar alguna tontería y volar. A diferencia de la mayoría de los cuerdos terrestres, vuelo. Suelo hacerlo a unos 100 metros aproximadamente pero a veces demasiado alto. Así, me cuesta el aterrizaje un puñado de consecuencias expresadas en forma de guantazos mentales.
-Qué bien-. He terminado de desayunar y son las 12:43 y me queda vestirme y correr a la parada del autobús y mientras lo espero ver pasar un Ford Fiesta, un Opel Corsa, un Mercedes antiguo de 2ª o 3ª mano, un BMW serie 1, otro, -me cambio de sitio a la sombra, detrás de la parada, porque vaya calor más bochornoso- un Peugeot 206, un 307, un 306, el autobús nº 3 que no va a la universidad, un camión de alguna obra o proveedor de algún producto y yo esperando miles de años con mis auriculares a modo de burbuja misatrópica escuchando September Song por Frank Sinatra -esperando que alguien con el necesario toque cínico irrumpa mi letargo y pregunte: ¡Hola! ¿Qué escuchas, me dejas un auricular?- pareciendo el tipo misterioso que deja de serlo por repensarlo. El mismo que sería la sombra más feliz de la Tierra al conocer de repente ese capullo de rosa azul que justo se abre frente a mí al escuchar esa mi música, su música. El día sería multicolor, un Sol suave pero cálido, sintiendo constantemente abrazos de un viento fresco y dulce que te dibuja una sonrisa. Y los árboles ríen, agrandan su tamaño al triple, por lo menos. El azul cián del cielo es la amplitud de mi mente infinita donde, hoy, no hay nubes, se desintegraron. Ella, desconocida, ha sido fiel a la improvisación. Osada. Y ya cautivo, llegaría el autobús, pero como si llegasen cien, o hubiera un atasco de continuos y desagradables pitidos...El día sería de ella, sería mío, sería feliz diez segundos, quizás un minuto...De pronto, llega un joven que la llama de un nombre raro, la ayuda con la carpeta y libro, y encadenados, marchan hacia la nada. El día ennegrece -¿día o noche?- los árboles son champiñones, una nube debora la pureza de la mente infinita y un señor dice que ha caído un meteorito en la universidad y que debo marchar a casa (si es que la tenía) a llorar o a pagar mi enfado con todo lo que haga y todos los que me rodeen. Le dije que quién era semejante impertinente mas no dijo palabra. Marché bajo un puente, con los vagabundos -ahora hermanos-. Había empezado a llover mucho. Ya no escuchaba Sinatra. Ahora escuchaba Mejor Pensar O No, de Frank-T. Ya no quería que nadie se me arrimase a escuchar lo que tenía, lo que me gusta. Hasta que una bella de harapos vestida, con su mirada, me dió calor, me enseñó su corazón un segundo para que lo viera, después lo guardó. Así, dejé la vida limpia, por la vida entera.
Pero ya son las 13:00...llegaría tarde y -total- solo para una clase y encima de teoría...Así que no fui. Ni si quiera salí de mi casa.
viernes, 30 de abril de 2010
domingo, 25 de abril de 2010
<< Powerful Smiling >>
El mejor corto que he visto en mi vida. También estaba obligado a compartirlo. Comenzaré diciendo que no he visto muchos cortos (entiéndase por "muchos" más de diez xD), por eso si alguien se anima y sabe de algún título de corto interesante, excitante, emotivo, -mejor siempre sea de sus preferidos- para enriquecer un poco más este campo que tengo abandonado.
Respecto su contenido, -vale- reconozco que me cuesta mucho ser quien toma la iniciativa en esas aventuras aparentemente imposibles, locuras para la mayoría, pero soy muy consciente y admiro que, sin llegar a rozar la imbecibilidad ni la burda falsedad, cambiarían tantas personas (me incluyo) con un pequeño empujoncito cada día de este tipo sería la chispa que encienda una larga llama...Y es que todo depende de con qué predisposición se perciba. Está bien que si no lo sientes en absoluto, no debas hacerlo. Mas si crees que puedes ser más grato, más humilde y cortés, educado y sincero, ahora mismo es buen momento para ensayar. Es claro que tardará mucho la siembra en producir frutos, no debemos desesperar. Cuando yo lo intento, lo observo, veo gratitud multiplicada por tres de la que yo di, aunque otras veces no veo nada. Esto es así, hay personas muy traumatizadas, incapaces de modificar su estado arisco y reservado, y hay que tenerles la misma consideración que a los que sí que entienden que tus formas, tu sutileza, les llevará al nuevo continente de la cordialidad. Siempre termino sermoneando y yéndome ocioso jugando por las ramas, pero no me toméis por más patético de lo que parece, al final todos tenemos nuestros defectos. Y comienza a retumbarme: todo depende de cómo se mire.
A mí este corto me puso los pelos de punta...estaría flojo, cabizbajo...Es posible, he pasado un último medio año muy cambiante. No sé cuando a las personas los recorren esos escalofríos, si ellas saben lo que significa para ellas, si se lo plantean, si identifican lo que sienten, la forma en que lo han hecho suyo...sería interesante hablar de ello con cada un@. Si bien, siempre me gusta intentar ponerme en el lugar de los demás, aunque sea echando mano del instinto animal intuitivo (he dicho animal porque ahora mismo pensando por encima me parece así, pero alguien que entienda de intuición podría aclarármelo sin ningún inconveniente, o yo mismo algún día lo haré) que tantas veces falla y que otras cuando acierta nos quedamos perplejos de si es casualidad o que eso de intuir ya venía en el pack cuando nos compramos.
Personalmente diré que, cuando esto me ocurre, es algo de adentro lo que está navegando entre la melodía que está escuchando ese sentido tan valioso que es el oído. Dejo de ser yo, entero, y una parte sola disfruta de lo que estoy escuchando y, en este caso, viendo también ¿A quién no le gusta surfear por los decibelios vibrantes de las ondas musicales? No puedo negar que es otro de los placeres de mi vida. Envolverme entre una melodía (o entre unas imágenes o escenas, unas palabras o todas a la vez) que me eleve a otra dimensión, para animar la de siempre, para hacerla mejor. Es como si eso que creo podría ser mi alma se fuera de la prisión física a otra dimensión en la imaginación...con unos efectos tan reales que me lo tengo que plantear ¿Existirá el alma? ¿Realmente podría asegurar qué es? ¿Tendrá que ver con otra Entidad Todo-poderosa? Aunque seguro estoy mezclando todo y estoy liándome más aún pero, por supuesto, todavía me queda mucho que investigar y conocer, porque, ¿Qué mayor placer supera al de entender qué está más próximo a la verdad? ¿Y cuán tortura la de aceptar que apenas conseguiremos encontrar un neutrón de un nano-átomo de todos los saberes? El símbolo del Ying Yang y todo su significado me refugia (y, al mismo tiempo, me exige que en un futuro dedique un tiempo a leer sobre el tema porque no es moco de pavo).
Sensaciones que consiguen traspasar los muros que distinguen el ruido de la magia polirrítmica de unas palabras y sentencias concatenadas con un mensaje melódico -a veces-, deleitando los oídos de todo ser con el placer de percibirlas; otras tantas subliminal, haciéndo pensar en mil y una ideas, surrealista para imaginar sin parar y recrear de vida aquellos sueños que siguen esperando, pacientes, dejar de serlo; aquellos subversivos, escepticistas, existenciales...esa información que, aunque puede ser abrumadora, cuando captamos con claridad su intención, es posible que nos replanteemos muchas de nuestras viejas creencias y prejuicios incluso modifiquen nuestro modo de comportarnos. Madonna en Frozen, dijo una de las primeras frases que formarían parte de mi filosofía de vida (y de mi primer contacto interesado -y no forzado- por el inglés). Y es: you only see what your eyes want to see, (exactamente la primera frase de la canción) es para mí fundamental a la hora de adquirir una posición objetiva de la vida, relativizando todo cuanto entiendo que ha de plantearse así. Y si nos pusiéramos a decir tantas máximas de canciones, poemas , novelas, ensayos...Nunca acabaríamos. Al menos hacer mención, que gracias a esas mentes lúcidas, pensadores, filósofos, políticos (que ya deberían reunir las otras dos), escritores, compositores, psicoanalistas, científicos...Gracias, es bueno recordar que aún existe gente que piensa o -si me apuran- personas que pensaron.
La vida sin esa ultra-sensibilidad que alcanzamos cuando realmente nos identificamos en algo...no tendría sentido.
jueves, 22 de abril de 2010
"...Pero, ¿Cómo conquistar el mundo con el estómago vacío?"
No aconsejaré muchos videos de documentales, pero si lo hago, creédme, me es necesidad que los vea alguien y que sea una cadena y llegue a todo afortunado.
En este caso, se trata de un documental sobre la situación actual consecuencia del pasado y amenaza del futuro de La Tierra. Dura una hora y media. Os aconsejo que entréis en el canal de homeprojectES y os informéis vosotr@s mism@s de todo.
Aquí el link al documental:
http://www.youtube.com/watch#!v=SWRHxh6XepM&playnext_from=TL&videos=LPyP4rCtFwk
Obligado a compartirlo. Más que hacer cualquier otra cosa "de provecho": comer, estudiar para el exámen de esta tarde, de la exposición del sábado (sí, toda la mañana del sábado), de los de dentro de un mes, de toda esa enseñanza, educación caducada, sociedad del bienestar dirigida por brillantes personas, de las cuales, los más admirables estarán jugando al golf en campos de Las Vegas (ciudad levantanda, al parecer, en pleno desierto, como bien es sabido).
Curioso. En Las Vegas se consume más del doble del promedio de EE.UU en agua. Estado que no consume a penas de nada...en absuluto, son la gracia de Dios, siempre que Eso tan grandioso se remita a unos cuantos billones de monedas y billetes, entonces sí. ¿Los mayores consumidores de agua del mundo? gran parte, son habitantes de aquella ciudad. Pero no nos engañemos ni nos obcequemos con The Bush Land, aquí en Europa (como en todo hogar con agua disponible) también nos gusta darnos duchas eternas o baños relajantes, en la bañera llena hasta el borde, caliente, bueno no, templada, después de un poco de deporte o de un día de no hacer nad... -digo- de trabajar... ¿No dan ganas de llenarla y darse un baño? Con este agobio de vida, vida acelerada, donde el último en llegar será víctima de reputación que lo alejará por siempre del elitismo y automáticamente lo convertirá en desechable y bajo, ¡Cualquiera no se redime a uno de estos baños!
Me estoy acordando de muchas cosas, especialmente de la suerte. Me siento raro por llamarme afortunado. Porque realmente no sé todavía qué parte de esa fortuna me tocó a mí. Pongamos que somos casi 7000 millones de habitantes en el mundo. La probabilidad de nacer en un país desarrollado puede rondar el 50% (estimación personal a partir de wikidatos; ¡Si alguien sabe de una fuente más directa y fiable que no dude en corregirme e informarme!).
Bien, partiendo de esas cifras, estoy obligado a ser consciente y recordar que de haber salido cruz en lugar de cara podría estar malviviendo en los suburbios de mi ciudad (aunque no necesariamente hay que vivir en un barrio marginal para vivir con desdicha), podría ser un pastor masai nómada, o un niño hindú más, un pakistaní, un niño ruso, un nigeriano lagosense, un pobre sierraleonés, o un haitiano (donde hoy estaría vivo si hubiera sobrevivido a los terremotos), e infinidad de nacionalidades más donde en la periferia o en el mismo centro más de la mitad de sus habitantes no tienen qué comer, ni mucho que hacer.
Ni uno, ni dos dólares para vivir cada día. Eso, hoy, es malvivir. Porque la educación se difumina en la supervivencia del día a día; la formación es la de conseguir medios para que no falte nada en su entorno cercano, en su familia. Mendigar, intimidar como recurso límite, robar...hasta matar. Es la vida, su vida. Si tú, que puedes vivir bien, con excesos, con lujos, no te encargas de regular el equilibrio o, mejor dicho, de modificar el desequilibrio existente entre una persona y otra, que siendo lo mismo, personas, viven y malviven totalmente de forma incomparable, no queda otra opción que, o bien acomodarse en el extremo, en el límite, y tan agustito vivir tu buena vida, aportar tu granito de arena en la sociedad del bienestar (con la ignorancia específica que eso supone) si eres afortunad@. De lo contrario, puedes unirte a una banda de la calle, una mafia, o a sobrevivir de la mejor forma, con poco dinero lo que, con tan poco dinero como es el caso, terminaría matándote con temprana edad...¿no prefieres vivir tú más que los demás, aunque tengas que pisarles la cabeza? Al fin y al cabo, los demás, capaces, con su indiferencia, seguro rebanan más cabezas en silencio e insconscientemente que esos asesinos por supervivencia (planteamiento muy limitado, cierto, pero vale para entender el mensaje); o bien podrías tener esa empatía (cuyo uso está cada día más mitigado) tan necesaria para verse ante todas las clases sociales y ante todo, lo primero como persona, como humano. A partir de entonces, siendo rico, clase-media o pobre, ello no importaría en absoluto porque pese a las diferencias mentales, irremediablemente nos une la vida como iguales seres vivos, humanos. No obstante, matizar que no puede ser igual una persona que sobrevive con 2 dólares en EE.UU., donde a la vuelta la esquina hay una oficina para contratarlo como militar, que en Sierra Leona, donde por más que busque no hay nada que pueda hacer que no sea sobrevivir con lo poco que queda tras el imperialismo de siglos anteriores...como en prácticamente todo el continente africano.
Extraño es que viendo todo el mundo lo mismo (o no tan igual, no olvidemos que los medios de comunicación son el 4º poder del Estado) percibamos la realidad de una forma tan pasiva, unos (me incluyo), y tan activa irremediablemente los otros, tan distinta. Aunque tengo que justificarme un poco en algo. En la consciencia de todos está que el lunes tiene exámen de Economía de la Unión Europea, de Derecho Civil, de Educación Ambiental, Programación, Física, etc., que esta noche tiene que llamar a su amad@ que está lejos (o no) la/el cual se enfada con severidad si no le llama todos los días aunque hayan estado todo el día juntos -¡Como si estuviera obligad@!- , que tiene que echarle gasolina al coche, que tiene que recargar la bateria del móvil, que tiene que levantarse una hora antes de trabajar, que tiene que depilarse, comprarse ropa cada día, maquillarse, ver el fútbol a las 21:45...
Así, con la consciencia tan ocupada, tan agobiados, hablan de fútbol, de cómo viste aquél/élla; que dan igual todos y todo lo que se anteponga a que apruebe el examen del lunes, a que termine la carrera en el tiempo especificado, a que mis baños son sagrados, a que llegue puntual...¡Aque! Que si tengo que destrozar moralmente a quien tenga delante mientras yo tenga que "dedicarme plenamente" a mi trabajo (amoral) no lo dudaré, que lo primero soy yo, mi cargo, que la gente se busque la vida, que lo arregle otro...
Pero, aunque se habla de los problemas del mundo (parece que cada vez más) todavía es insuficiente. Que se corra la voz (dentro de la subjetividad innata, de la manera más objetiva posible) es sólo el primer incentivo para que de esta gente consciente se reactive y nos pongamos manos a la obra para mejorar las situaciones mejorables. Luchando por la real aplicación de los Derechos Humanos, adaptarlos si es preciso a otro nuevo régimen mundial. Aprovechar la globalización para compadecer al prójimo en su desgracia. Aprovechar nuestra calidad de humanos será la clave para salvarnos de potenciales guerras, para preservar la flora y fauna, para alargar la vida del Planeta que, como la nuestra, parece irremediable que no podrá ser eterna.
Me quedo aquí. Extenderme más, reconozco que puede ser perderme más, pero sólo necesitaba confesar -como yo quiero- esto que siento y percibo.
Creo que el imperialismo sigue vigente aunque muy adornado, aceptado, asumido. Exáctamente como las diferencias entre las personas.
Nunca llené la bañera, ni buscado relax, o por dolor, ni nada por el estilo, resuelvo los problemas descansando más y punto. Lo cierto es que con las duchas de 20 minutos que a diario tomo ya estoy derrochando demasiado. Seré más rápido y, en caso de estrés, dormiré antes y más. Ceno, almuerzo y desayuno hasta saciar el hambre y, a menudo, hasta saciar una ansia (característica aquí en Occidente) causada por alguna aflicción mental, lo cual a veces me ha dado dolor de estómago, olvidando que por ahí, no tan lejos se mueren de hambre. Creo que podré vivir sin consumir tanta comida. Imprimo cantidades importantes de apuntes, aunque no sé si en las copisterías que frecuento usan papel reciclado, me informaré. De cualquier modo, usar papel supone tala de árboles. También lo olvido, lo recordaré. En verano parece difícil vivir ya sin aire acondicionado, con el gasto de energía que supone, con la contaminación que implica. Me abanicaré. Y la luz, con la que da el sol debería bastar, pero eso de crear nuevas necesidades nos gusta tanto...que luego no podemos vivir sin su satisfacción.
Disfruten del documental, y reflexionen.
Salud y República.
En este caso, se trata de un documental sobre la situación actual consecuencia del pasado y amenaza del futuro de La Tierra. Dura una hora y media. Os aconsejo que entréis en el canal de homeprojectES y os informéis vosotr@s mism@s de todo.
Aquí el link al documental:
http://www.youtube.com/watch#!v=SWRHxh6XepM&playnext_from=TL&videos=LPyP4rCtFwk
Obligado a compartirlo. Más que hacer cualquier otra cosa "de provecho": comer, estudiar para el exámen de esta tarde, de la exposición del sábado (sí, toda la mañana del sábado), de los de dentro de un mes, de toda esa enseñanza, educación caducada, sociedad del bienestar dirigida por brillantes personas, de las cuales, los más admirables estarán jugando al golf en campos de Las Vegas (ciudad levantanda, al parecer, en pleno desierto, como bien es sabido).
Curioso. En Las Vegas se consume más del doble del promedio de EE.UU en agua. Estado que no consume a penas de nada...en absuluto, son la gracia de Dios, siempre que Eso tan grandioso se remita a unos cuantos billones de monedas y billetes, entonces sí. ¿Los mayores consumidores de agua del mundo? gran parte, son habitantes de aquella ciudad. Pero no nos engañemos ni nos obcequemos con The Bush Land, aquí en Europa (como en todo hogar con agua disponible) también nos gusta darnos duchas eternas o baños relajantes, en la bañera llena hasta el borde, caliente, bueno no, templada, después de un poco de deporte o de un día de no hacer nad... -digo- de trabajar... ¿No dan ganas de llenarla y darse un baño? Con este agobio de vida, vida acelerada, donde el último en llegar será víctima de reputación que lo alejará por siempre del elitismo y automáticamente lo convertirá en desechable y bajo, ¡Cualquiera no se redime a uno de estos baños!
Me estoy acordando de muchas cosas, especialmente de la suerte. Me siento raro por llamarme afortunado. Porque realmente no sé todavía qué parte de esa fortuna me tocó a mí. Pongamos que somos casi 7000 millones de habitantes en el mundo. La probabilidad de nacer en un país desarrollado puede rondar el 50% (estimación personal a partir de wikidatos; ¡Si alguien sabe de una fuente más directa y fiable que no dude en corregirme e informarme!).
Bien, partiendo de esas cifras, estoy obligado a ser consciente y recordar que de haber salido cruz en lugar de cara podría estar malviviendo en los suburbios de mi ciudad (aunque no necesariamente hay que vivir en un barrio marginal para vivir con desdicha), podría ser un pastor masai nómada, o un niño hindú más, un pakistaní, un niño ruso, un nigeriano lagosense, un pobre sierraleonés, o un haitiano (donde hoy estaría vivo si hubiera sobrevivido a los terremotos), e infinidad de nacionalidades más donde en la periferia o en el mismo centro más de la mitad de sus habitantes no tienen qué comer, ni mucho que hacer.
Ni uno, ni dos dólares para vivir cada día. Eso, hoy, es malvivir. Porque la educación se difumina en la supervivencia del día a día; la formación es la de conseguir medios para que no falte nada en su entorno cercano, en su familia. Mendigar, intimidar como recurso límite, robar...hasta matar. Es la vida, su vida. Si tú, que puedes vivir bien, con excesos, con lujos, no te encargas de regular el equilibrio o, mejor dicho, de modificar el desequilibrio existente entre una persona y otra, que siendo lo mismo, personas, viven y malviven totalmente de forma incomparable, no queda otra opción que, o bien acomodarse en el extremo, en el límite, y tan agustito vivir tu buena vida, aportar tu granito de arena en la sociedad del bienestar (con la ignorancia específica que eso supone) si eres afortunad@. De lo contrario, puedes unirte a una banda de la calle, una mafia, o a sobrevivir de la mejor forma, con poco dinero lo que, con tan poco dinero como es el caso, terminaría matándote con temprana edad...¿no prefieres vivir tú más que los demás, aunque tengas que pisarles la cabeza? Al fin y al cabo, los demás, capaces, con su indiferencia, seguro rebanan más cabezas en silencio e insconscientemente que esos asesinos por supervivencia (planteamiento muy limitado, cierto, pero vale para entender el mensaje); o bien podrías tener esa empatía (cuyo uso está cada día más mitigado) tan necesaria para verse ante todas las clases sociales y ante todo, lo primero como persona, como humano. A partir de entonces, siendo rico, clase-media o pobre, ello no importaría en absoluto porque pese a las diferencias mentales, irremediablemente nos une la vida como iguales seres vivos, humanos. No obstante, matizar que no puede ser igual una persona que sobrevive con 2 dólares en EE.UU., donde a la vuelta la esquina hay una oficina para contratarlo como militar, que en Sierra Leona, donde por más que busque no hay nada que pueda hacer que no sea sobrevivir con lo poco que queda tras el imperialismo de siglos anteriores...como en prácticamente todo el continente africano.
Extraño es que viendo todo el mundo lo mismo (o no tan igual, no olvidemos que los medios de comunicación son el 4º poder del Estado) percibamos la realidad de una forma tan pasiva, unos (me incluyo), y tan activa irremediablemente los otros, tan distinta. Aunque tengo que justificarme un poco en algo. En la consciencia de todos está que el lunes tiene exámen de Economía de la Unión Europea, de Derecho Civil, de Educación Ambiental, Programación, Física, etc., que esta noche tiene que llamar a su amad@ que está lejos (o no) la/el cual se enfada con severidad si no le llama todos los días aunque hayan estado todo el día juntos -¡Como si estuviera obligad@!- , que tiene que echarle gasolina al coche, que tiene que recargar la bateria del móvil, que tiene que levantarse una hora antes de trabajar, que tiene que depilarse, comprarse ropa cada día, maquillarse, ver el fútbol a las 21:45...
Así, con la consciencia tan ocupada, tan agobiados, hablan de fútbol, de cómo viste aquél/élla; que dan igual todos y todo lo que se anteponga a que apruebe el examen del lunes, a que termine la carrera en el tiempo especificado, a que mis baños son sagrados, a que llegue puntual...¡Aque! Que si tengo que destrozar moralmente a quien tenga delante mientras yo tenga que "dedicarme plenamente" a mi trabajo (amoral) no lo dudaré, que lo primero soy yo, mi cargo, que la gente se busque la vida, que lo arregle otro...
Pero, aunque se habla de los problemas del mundo (parece que cada vez más) todavía es insuficiente. Que se corra la voz (dentro de la subjetividad innata, de la manera más objetiva posible) es sólo el primer incentivo para que de esta gente consciente se reactive y nos pongamos manos a la obra para mejorar las situaciones mejorables. Luchando por la real aplicación de los Derechos Humanos, adaptarlos si es preciso a otro nuevo régimen mundial. Aprovechar la globalización para compadecer al prójimo en su desgracia. Aprovechar nuestra calidad de humanos será la clave para salvarnos de potenciales guerras, para preservar la flora y fauna, para alargar la vida del Planeta que, como la nuestra, parece irremediable que no podrá ser eterna.
Me quedo aquí. Extenderme más, reconozco que puede ser perderme más, pero sólo necesitaba confesar -como yo quiero- esto que siento y percibo.
Creo que el imperialismo sigue vigente aunque muy adornado, aceptado, asumido. Exáctamente como las diferencias entre las personas.
Nunca llené la bañera, ni buscado relax, o por dolor, ni nada por el estilo, resuelvo los problemas descansando más y punto. Lo cierto es que con las duchas de 20 minutos que a diario tomo ya estoy derrochando demasiado. Seré más rápido y, en caso de estrés, dormiré antes y más. Ceno, almuerzo y desayuno hasta saciar el hambre y, a menudo, hasta saciar una ansia (característica aquí en Occidente) causada por alguna aflicción mental, lo cual a veces me ha dado dolor de estómago, olvidando que por ahí, no tan lejos se mueren de hambre. Creo que podré vivir sin consumir tanta comida. Imprimo cantidades importantes de apuntes, aunque no sé si en las copisterías que frecuento usan papel reciclado, me informaré. De cualquier modo, usar papel supone tala de árboles. También lo olvido, lo recordaré. En verano parece difícil vivir ya sin aire acondicionado, con el gasto de energía que supone, con la contaminación que implica. Me abanicaré. Y la luz, con la que da el sol debería bastar, pero eso de crear nuevas necesidades nos gusta tanto...que luego no podemos vivir sin su satisfacción.
Disfruten del documental, y reflexionen.
Salud y República.
jueves, 15 de abril de 2010
El comienzo.
Presentación del Yo.
Me llamo Luis. Tengo 22 años cumplidos ayer 14 abril, 79 aniversario de la II República española.
Cada vez me gusta más el cine. Veo varias películas al mes, a menudo por semana. Siempre tienen algo que puedes coger prestado. Me gusta pintar (con acrílico) aunque más bien siempre me ha gustado dibujar, ahora lo tengo bastante abandonado. Pero sí que terminé el primer y último cuadro, que empecé hacía un año más o menos. El resultado: es muestra clara de nula práctica ni conocimiento de técnicas de dibujo, un poco simple y profundo, y por esto último me calma...No está perfecto por supuesto, ni lo imperfecto que está basta para consolarme de que la perfección es una tortura obsesiva que hay que superar. Me encanta escuchar música, de todos los tipos. A veces me imagino, así, escribiendo, mientras escucho Chopin: Waltz #6 In D Flat, Op. 64 nº1, Minute Waltz; o bien Prokofiev: Romeo and Juliet - Dance of the Knights, noto como mi cuerpo se queda apalancado, seco en la silla, vacío, es una cosa...y un algo, más que una simple cosa, ¿mi alma?, salta de adentro,se eleva y mi mente proyecta encima del cuerpo caído, una inmensa sala de baile del siglo de oro...Cuánto reluce el mármol de azabache; puedo ver mi reflejo perfectamente; qué cuidadas aquellas antiguas columnas: eternas; la sala llena de elegantes trajeados, bailando mujer y hombre juntos, despacio, sincronizados, sabiendo hacerlo de forma innata, y me uno al vals, y ya soy uno más... Leo de vez en cuando, cada vez parece que más, y me cuesta menos...es lo que tiene haber llevado una pubertad vertida plenamente en el ocio, cuando en el ocio no incluía leer, porque me parecía aburrido sobre todas las cosas...¡ya tenía suficiente con el estudio! La ignorancia me dominaba sin escrúpulos. Hoy por hoy, aunque ignorante todavía (temo nunca dejaré de serlo), gracias a la madurez, a las circunstancias, al mejor uso de la razón, entre otros factores, leer me gusta más. Mirar mi estantería y ver todo lo que me queda por leer, lo que llevo leído, la riqueza de vocabulario, de conocimiento, cultura, opinión, retórica, adquiridos, por adquirir...un libro, mucho más que un montón de hojas con letras. Demasiado. Perenne huella durante la vida, tras la muerte. Como de alguien que escuché o leí: Antes de morir habrás tenido que plantar un árbol, haber tenido un hijo, escrito un libro (por supuesto, uno de cada cual como mínimo).
Necesario era comenzar alabando la madre de toda escritura, sin olvidar las madrastras como son la experiencia o la inspiración, porque una persona que carece de una de ellas, descarado es al leer lo escrito.
Mi estado anímico hoy es bueno. Si entendemos como bueno, que mi salud está en una línea que ahora mismo se mantiene constante pero que a largo plazo va creciendo; mi vida sentimental es soltería, la cual te libera pero al mismo tiempo te atrapa con facilidad; intelectualmente creo que un estado normal para una persona de 22 años, si bien, el estudio nunca ha sido algo que haya llevado al día ni controlado...sí, se me va echando el tiempo encima y a última hora me desespero, me arranco los padrastros de los dedos, me duele el cuerpo de estar sentado todo el día y noche y llego a los exámenes echo un desastre, cansado y si apruebo: por los pelos. Si suspendo, el 3'5 es mal amigo mío pero me quiere mucho por lo visto, vamos que frecuento la franja 3'5 - 6. En general, mi ánimo suele dar muchos tumbos. Últimamente han ocurrido muchas vivencias que me han marcado el hoy, se precipitan parece y me cuesta sonreír solamente sin hacer patente esa variedad de recuerdos fatuos, tristes, borrosos e impertinentes. Así, mueca sonriente con matiz de tener la conciencia a modo de mochila, y me carga en la espalda. Caminar hacia delante, sólo caminar, ya me pesa. Evidentemente yo soy quien decide todo esto, y quien voluntaria o impulsivamente lo acepta. El arrepentimiento castiga mi responsabilidad cuando no está a la altura y eso es normalmente en época de exámenes.
Sí, debo hacer algo por mejorar toda esta parafernalia, ¿eh? descuidado, necio e hipócrita de mí si así no lo hiciere. Pero hay algo. Estudio Empresariales, y no es que fuera la diplomatura que más preferí, pero cuando terminé selectividad en septiembre de 2006, mi nota media rozaba el 5'3 que distaba mucho de Magisterio de Educación Física que requería un 7 de corte por aquel entonces. Ni ed. física, ni psicología, ni turismo...Empresariales. Comencé el primer curso y si no fue un hachazo, fueron tantos. "Si vales, vales y si no pa' Empresariales" y todos esos dichos, la verdad que me parecen graciosos, decir que una persona vale por la nota que saca en unos exámenes, que te condiciona para aprobar o suspender, así como para conseguir el título o no, siempre es chistoso. Un día mi amigo Nacho me dijo con tono bobo: "La vida no depende de una sola variable, ¿no sería una buena entrada para el Fotolog?" Quizás no la dijera con el sentido tan profundo que yo capté, pero esa frase la llevo dentro, solo es cuestión de repensarla un poco. Gracias Nacho, siempre tan espléndido.
Siento haber caído en lo peor que se puede caer, y es que explayarse hablando sobre uno mismo a nadie le cuesta, y ningún valor se le da, y yo estoy de acuerdo, pero esto es la presentación y no es la presentación de otra cosa que de mí mismo, quien escribe lo que y cuando me apetece, a pesar de faltar al cánon del típico brillante y admirado escritor. Correcto, también me dejo llevar a menudo por los prejuicios.
Voy a seguir cenando, y ahora sí, os dejo (realmente creo que estoy hablando conmigo mismo, no soy gilipollas del todo, porque nadie se leerá un tocho de estos así por que sí sin saber de este enlace ni nada, menos siendo de alguien y sobre ese alguien...aunque quien sabe, podría aportarte algo, siempre está eso ahí, en cualquier caso lo siento, yo disfruto haciendo esto). Desde ya, este blog será presa de la vida de un frustrado más, que disfruta de cosas que el sistema capitalista eliminaría o privatizaría o cambiaría si no fuera porque estas ocurren en el interior de un cuerpo vivo, en una mente, una percepción, un disfrute único y obviamente fuera del alcance de cualquier dogma, es inherente al patrimonio individual, y no importa si nadie lo valora como a uno mismo le gusta.
Para mí ser crítico por naturaleza es mucho mejor que ser un conformista o buen-rollista porque sí, porque paso de movidas...venga ya, hombre. Mi meta es llegar más allá.
Sin más.
Salud y República.
Me llamo Luis. Tengo 22 años cumplidos ayer 14 abril, 79 aniversario de la II República española.
Cada vez me gusta más el cine. Veo varias películas al mes, a menudo por semana. Siempre tienen algo que puedes coger prestado. Me gusta pintar (con acrílico) aunque más bien siempre me ha gustado dibujar, ahora lo tengo bastante abandonado. Pero sí que terminé el primer y último cuadro, que empecé hacía un año más o menos. El resultado: es muestra clara de nula práctica ni conocimiento de técnicas de dibujo, un poco simple y profundo, y por esto último me calma...No está perfecto por supuesto, ni lo imperfecto que está basta para consolarme de que la perfección es una tortura obsesiva que hay que superar. Me encanta escuchar música, de todos los tipos. A veces me imagino, así, escribiendo, mientras escucho Chopin: Waltz #6 In D Flat, Op. 64 nº1, Minute Waltz; o bien Prokofiev: Romeo and Juliet - Dance of the Knights, noto como mi cuerpo se queda apalancado, seco en la silla, vacío, es una cosa...y un algo, más que una simple cosa, ¿mi alma?, salta de adentro,se eleva y mi mente proyecta encima del cuerpo caído, una inmensa sala de baile del siglo de oro...Cuánto reluce el mármol de azabache; puedo ver mi reflejo perfectamente; qué cuidadas aquellas antiguas columnas: eternas; la sala llena de elegantes trajeados, bailando mujer y hombre juntos, despacio, sincronizados, sabiendo hacerlo de forma innata, y me uno al vals, y ya soy uno más... Leo de vez en cuando, cada vez parece que más, y me cuesta menos...es lo que tiene haber llevado una pubertad vertida plenamente en el ocio, cuando en el ocio no incluía leer, porque me parecía aburrido sobre todas las cosas...¡ya tenía suficiente con el estudio! La ignorancia me dominaba sin escrúpulos. Hoy por hoy, aunque ignorante todavía (temo nunca dejaré de serlo), gracias a la madurez, a las circunstancias, al mejor uso de la razón, entre otros factores, leer me gusta más. Mirar mi estantería y ver todo lo que me queda por leer, lo que llevo leído, la riqueza de vocabulario, de conocimiento, cultura, opinión, retórica, adquiridos, por adquirir...un libro, mucho más que un montón de hojas con letras. Demasiado. Perenne huella durante la vida, tras la muerte. Como de alguien que escuché o leí: Antes de morir habrás tenido que plantar un árbol, haber tenido un hijo, escrito un libro (por supuesto, uno de cada cual como mínimo).
Necesario era comenzar alabando la madre de toda escritura, sin olvidar las madrastras como son la experiencia o la inspiración, porque una persona que carece de una de ellas, descarado es al leer lo escrito.
Mi estado anímico hoy es bueno. Si entendemos como bueno, que mi salud está en una línea que ahora mismo se mantiene constante pero que a largo plazo va creciendo; mi vida sentimental es soltería, la cual te libera pero al mismo tiempo te atrapa con facilidad; intelectualmente creo que un estado normal para una persona de 22 años, si bien, el estudio nunca ha sido algo que haya llevado al día ni controlado...sí, se me va echando el tiempo encima y a última hora me desespero, me arranco los padrastros de los dedos, me duele el cuerpo de estar sentado todo el día y noche y llego a los exámenes echo un desastre, cansado y si apruebo: por los pelos. Si suspendo, el 3'5 es mal amigo mío pero me quiere mucho por lo visto, vamos que frecuento la franja 3'5 - 6. En general, mi ánimo suele dar muchos tumbos. Últimamente han ocurrido muchas vivencias que me han marcado el hoy, se precipitan parece y me cuesta sonreír solamente sin hacer patente esa variedad de recuerdos fatuos, tristes, borrosos e impertinentes. Así, mueca sonriente con matiz de tener la conciencia a modo de mochila, y me carga en la espalda. Caminar hacia delante, sólo caminar, ya me pesa. Evidentemente yo soy quien decide todo esto, y quien voluntaria o impulsivamente lo acepta. El arrepentimiento castiga mi responsabilidad cuando no está a la altura y eso es normalmente en época de exámenes.
Sí, debo hacer algo por mejorar toda esta parafernalia, ¿eh? descuidado, necio e hipócrita de mí si así no lo hiciere. Pero hay algo. Estudio Empresariales, y no es que fuera la diplomatura que más preferí, pero cuando terminé selectividad en septiembre de 2006, mi nota media rozaba el 5'3 que distaba mucho de Magisterio de Educación Física que requería un 7 de corte por aquel entonces. Ni ed. física, ni psicología, ni turismo...Empresariales. Comencé el primer curso y si no fue un hachazo, fueron tantos. "Si vales, vales y si no pa' Empresariales" y todos esos dichos, la verdad que me parecen graciosos, decir que una persona vale por la nota que saca en unos exámenes, que te condiciona para aprobar o suspender, así como para conseguir el título o no, siempre es chistoso. Un día mi amigo Nacho me dijo con tono bobo: "La vida no depende de una sola variable, ¿no sería una buena entrada para el Fotolog?" Quizás no la dijera con el sentido tan profundo que yo capté, pero esa frase la llevo dentro, solo es cuestión de repensarla un poco. Gracias Nacho, siempre tan espléndido.
Siento haber caído en lo peor que se puede caer, y es que explayarse hablando sobre uno mismo a nadie le cuesta, y ningún valor se le da, y yo estoy de acuerdo, pero esto es la presentación y no es la presentación de otra cosa que de mí mismo, quien escribe lo que y cuando me apetece, a pesar de faltar al cánon del típico brillante y admirado escritor. Correcto, también me dejo llevar a menudo por los prejuicios.
Voy a seguir cenando, y ahora sí, os dejo (realmente creo que estoy hablando conmigo mismo, no soy gilipollas del todo, porque nadie se leerá un tocho de estos así por que sí sin saber de este enlace ni nada, menos siendo de alguien y sobre ese alguien...aunque quien sabe, podría aportarte algo, siempre está eso ahí, en cualquier caso lo siento, yo disfruto haciendo esto). Desde ya, este blog será presa de la vida de un frustrado más, que disfruta de cosas que el sistema capitalista eliminaría o privatizaría o cambiaría si no fuera porque estas ocurren en el interior de un cuerpo vivo, en una mente, una percepción, un disfrute único y obviamente fuera del alcance de cualquier dogma, es inherente al patrimonio individual, y no importa si nadie lo valora como a uno mismo le gusta.
Para mí ser crítico por naturaleza es mucho mejor que ser un conformista o buen-rollista porque sí, porque paso de movidas...venga ya, hombre. Mi meta es llegar más allá.
Sin más.
Salud y República.
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